Las asesorías fiscales tienen un importante papel en el asesoramiento tanto de pequeños como de grandes patrimonios. La gestión de este tipo de profesionales puede ayudarte a ahorrarte grandes sumas de dinero, así como posibles multas a causa del desconocimiento de los plazos o de la presentación de modelos en Hacienda. ¿Cómo ha cambiado su papel tras la COVID-19?

 

Novedades en una asesoría fiscal tras el coronavirus

Seguro que has notado cómo el coronavirus ha marcado un antes y un después, tanto en tu negocio o en tu trabajo como en tu vida en sí misma. Lo mismo ha ocurrido en el asesoramiento fiscal, cuyo papel llega con novedades tras la pandemia.

 

1. Los ERTEs

Una de las noticias más sonadas en tiempos del coronavirus ha sido la de los ERTEs. Numerosas empresas se han visto obligadas a recurrir a esta figura al tener que cesar sus negocios temporalmente. Sin embargo, también debemos señalar que es una figura bastante novedosa, y cuyas condiciones se han ido regulando a lo largo de los meses de estado de alarma sobre la marcha, lo cual ha hecho que muchos empresarios no supieran cómo gestionar este asunto.

Los ERTEs, a pesar de que el estado de alarma ha cesado, se van a prolongar hasta finales de septiembre. Podríamos decir que este es uno de los papeles más importantes que tienen las asesorías laborales y fiscales en tiempos del coronavirus. Si acudes a profesionales siempre tienes la seguridad de que lo estás haciendo correctamente, evitando multas o que incluso un trabajador te acabe denunciando por vía penal, ya que los asesores fiscales conocen todos los protocolos necesarios a seguir a la hora de actuar, y la letra pequeña de la ley.

 

2. Tendrás información de primera mano

De nuevo, a pesar de que el estado de alarma ha pasado, la desescalada continúa siendo progresiva. Por tanto, la actividad del legislativo continúa de forma más fuerte e intensa que en todos estos últimos años, y no solo en materia sanitaria, sino también en el ámbito económico, laboral y empresarial. Continuamente hay nuevas medidas para empresas grandes, para pymes o para autónomos, hasta el punto de que es muy difícil seguirla por uno mismo.

Este es otro importante papel de una asesoría fiscal. Con el trabajo de los asesores, siempre tendrás información actualizada de primera mano y no se te escapará ningún detalle sobre las medidas que se vayan aprobando estos meses de adaptación a la «nueva normalidad». Las asesorías tienen especial cuidado en la materia específica de la COVID-19, ya que es la que más se solicita y cambia cada día.

 

3. La gestión de tu economía

La gestión de la economía ha sido siempre un importante papel de las asesorías, pero en tiempos del coronavirus también suponen una novedad. En la actualidad, se están permitiendo muchos aplazamientos fiscales para los profesionales, pero no siempre quedan claros los requisitos o la forma de solicitarlo. Incluso, en ocasiones, no sabemos si nos conviene hacer o no dicha moratoria. Si son preguntas que te haces habitualmente, con los profesionales de la asesoría fiscal dejará de ser un problema, ya que todos estos problemas, así como el resto de tus dudas al respecto, se solventarán. También, te pueden asesorar sobre cómo gestionar tu economía para seguir manteniendo a flote tu negocio en estos tiempos tan duros.

Tras la pandemia del coronavirus, todos hemos tenido que adaptarnos a una serie de cambios. Las asesorías han adquirido un papel diferente, que se ha traducido en la adquisición de nuevas competencias por parte de estos profesionales a la hora de ayudarte.

 

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Los ERES después de un ERTE constituyen una figura muy común en la actualidad, en la que muchas personas con pequeñas, medianas y grandes empresas han tenido que recurrir a ellos para hacer frente a la situación generada por la Covid-19. Pero, ¿qué gastos genera?

 

Principales gastos de un ERE después del ERTE

Antes de explicar los principales costes que tiene un ERE, debemos aclararte la diferencia entre uno y otro. Básicamente, el ERTE conlleva la temporalidad del trabajador en su puesto de trabajo, mientras que en el ERE, la relación laboral finaliza. Esto lleva a muchas personas a preguntarse si después del ERTE pueden recibir un ERE, cuestión que trataremos a continuación.

Uno de los mejores consejos que podemos darte para que evites gastos judiciales es que negocies previamente el ERE con el trabajador. Más adelante, en las posibles reclamaciones, te contamos por qué.

Aunque la ley obliga a la continuidad del trabajo, no especifica que no se pueda convertir en ERE un ERTE, por lo que sí es algo que podría pasar. Igualmente, un hecho reciente a destacar es que el Ministerio de Trabajo ha comunicado que no se podrá alargar ningún ERTE más allá de octubre, lo cual generará que muchas empresas recurran al ERE.

 

1. La indemnización

La indemnización es el primero de los gastos que tendría que asumir tu empresa si hace un ERE después de un ERTE. La cuantía de la misma será, de acuerdo con la legislación laboral, de mínimo 20 días por cada año que el trabajador haya prestado servicios en tu empresa. No obstante, el límite se establece en doce mensualidades.

Además, ten en cuenta que el ERTE implicó para el trabajador una gran disminución de su salario. No obstante, a la hora de calcular la indemnización del ERE tras haber hecho un ERTE, no se tendrá en cuenta el salario de este último, sino el completo, es decir, el que el trabajador disfrutaba previamente al ERTE. Si tu empresa no pudiera hacer frente al gasto, el abono se realizaría por el Fondo de Garantía Salarial (FOGASA).

 

2. El finiquito

Al ser un ERE una finalización de la relación laboral, conllevará el pago del finiquito al trabajador. El cálculo del finiquito, en el caso de que el trabajador tuviera un contrato fijo, dependerá de diversos factores. Entre ellos, los días del mes que el trabajador haya prestado sus servicios, la liquidación de las vacaciones que este no haya disfrutado y las pagas extras.

 

Coste ERE e indemnizaciones

 

3. Las posibles reclamaciones

Si el trabajador considera que como empresario no has hecho adecuadamente el proceso de ERE, es posible que establezca una reclamación judicial, por eso es mejor siempre acompañarse de asesores expertos. En el caso de que se ponga una reclamación contra tu empresa, es posible que te tengas que enfrentar a gastos judiciales o a algún tipo de responsabilidad civil.

La reclamación judicial y los gastos que conlleva es más común de lo que podrías llegar a pensar. Principalmente, porque los trabajadores muchas veces quieren negociar la indemnización. Esto se debe a que la indemnización del ERE, como te hemos mencionado, es de 20 días por año trabajado con un máximo de doce mensualidades.

No obstante, si judicialmente consiguen que se declare como despido improcedente, la indemnización será de 33 días por año trabajado, lo cual es mucho más beneficioso para el trabajador, pero supone más gastos.

Los ERES, después de que una empresa haya hecho un ERTE a sus trabajadores, generan muchas dudas, tanto a empresarios como a trabajadores. Especialmente, en el primer caso, suscita muchas preguntas en torno a sus costes.

 

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La importancia de las asesorías para empresas se ha vuelto mucho más crucial desde que comenzara la crisis del coronavirus y el estado de alarma. Tramitar ayudas y subvenciones extraordinarias, asesorar sobre cómo es mejor proceder con un negocio o acogerse a las diferentes moratorias legales son algunos de los servicios en los que te pueden echar una mano las asesorías.

 

Razones por las que acudir a una asesoría

El estado de alarma con motivo de la crisis sanitaria del COVID-19 obligó a muchos negocios a cerrar. La mayoría de los que siguieron trabajando se han visto afectados por la falta de actividad del mercado y la caída en el consumo. Las diferentes administraciones y muchas entidades bancarias lanzaron en su día paquetes de ayudas para pymes y autónomos que, en muchas ocasiones, son complicados de gestionar. Si estás en esta situación, mira, a continuación, todo lo que una asesoría podría hacer por ti y tu negocio.

 

1. Gestión de los ERTEs

La aprobación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo por causas de fuerza mayor (ERTEs) necesitan de una complicada burocracia, tanto por parte de los bancos (que son quienes pagan) como por parte del servicio público, SEPE. Para canalizar bien las peticiones, las asesorías se han convertido en el único interlocutor válido con estos organismos.

Has de tener en cuenta que, cuántos más empleados tengas en tu empresa, más papeleo vas a necesitar. Además, la cuantía de la ayuda puede variar en función de las situaciones personales de cada uno (por ejemplo, tener o no hijos). Un asesor va a conocer la normativa al «dedillo» y para ti será tan sencillo como facilitarle la documentación que te pida y esperar a que te llegue la ayuda.

 

Asesoría para empresas en tiempo de cuarentena

 

2. Gestión de los créditos ICO

Los créditos ICO son aprobados por el Instituto de Crédito Oficial y por las entidades bancarias. Si necesitas liquidez para salvar tu negocio tendrás que pedir uno de ellos. Como consecuencia de la pandemia y la situación económica de pymes y autónomos, el Gobierno de España amplió la cantidad destinada a los ICOs pero, para optar a ellos, es necesario reunir una serie de requisitos.

Las asesorías pueden informarte al detalle sobre cuáles son esos requisitos y si los cumples, encargándose de tramitar tu solicitud y preparar toda la documentación. Además, en caso de cualquier problema, ellos también se encargan de las reclamaciones y de informarte sobre cómo va el proceso.

 

3. Asesoramiento fiscal general

Seguramente, la situación económica actual te genere más de una preocupación, tanto si eres empresario como autónomo. Dudas como si existen ayudas regionales que complementen a las autonómicas, si puedes aplazar ciertos impuestos o si tienes derecho a las moratorias extraordinarias como consecuencia del COVID-19.

Nadie mejor que los profesionales de una asesoría para que te hagan un balance lo más actual posible de las cuentas de tu empresa y te expliquen a todas las ayudas y subvenciones a las que tienes derecho. Además, podrán prevenirte sobre cómo impactarán en tu declaración de la renta del próximo año, ya que algunas de estas ayudas son tributables y esa «letra pequeña» no la sabrás, a menos que te lo digan.

En definitiva, si tu negocio ha sufrido, en menor o mayor medida con la crisis del coronavirus, lo mejor que puedes hacer es consultar con una asesoría sobre qué ayudas existen y cuáles te corresponden. Deja a los profesionales con las gestiones y la burocracia para poder céntrate en lo realmente importante: salvar tu negocio y a tu plantilla.

 

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Determinadas circunstancias provocan crisis económicas. Y ello exige un esfuerzo por parte del mercado para adaptarse rápidamente a la nueva situación, reduciendo el perjudico económico. Cuando a los particulares se nos habla de la evolución del mercado puede sonarnos algo lejano, pero la realidad es que a todos nos afecta. Por estas razones, es imprescindible que cuentes con la ayuda de asesorías legales capaces de conseguir que los picos del mercado te afecten lo menos posible.

 

¿Por qué razones es tan importante el asesoramiento legal de los profesionales?

 

Hay que seguir haciendo frente al pago de impuestos

Como bien sabes, la economía debe paralizarse a la mínima expresión. Para ello, es necesario lograr que una crisis afecte al menor número de contribuyentes posible.

Sin perjuicio de lo anterior, existen ciertos beneficios fiscales. En función de las medidas que hayan sido plasmadas en la normativa, puedes pedir la suspensión de determinadas cuotas o ampliación de plazos. Eso sí, debes cumplir unos requisitos mínimos y presentar las solicitudes pertinentes dentro de los plazos establecidos.

 

Ayuda a los autónomos

Una crisis no afecta a todos los sectores profesionales de la misma forma. En el caso de los trabajadores independientes, estos efectos pueden verse algo más claros. El abogado o dentista, por poner dos ejemplos, que durante un periodo de tiempo no haya tenido actividad sufrirá un gran detrimento económico.

Pero las asesorías están para ayudar en este tipo de casos. Pueden lograr la condonación de ciertos pagos de cuota durante el lapso temporal de afectación. Así se minimiza el perjuicio económico al autónomo, que posteriormente podrá hacer frente a sus obligaciones fiscales.

 

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El pago del IVA de las sociedades

Igual que sucede con los trabajadores autónomos, para las empresas existen igualmente ciertos beneficios a los que pueden acogerse. La declaración trimestral del IVA en aquellos meses en los que el rendimiento del trabajo ha sido escaso supone un aumento de las facturas. Dicho aumento deriva en una mayor contribución a través del impuesto de sociedades.

Los asesores fiscales están estudiando continuamente cómo interpretar la ley para hacer frente a situaciones excepciones. Serán estos profesionales los que estén capacitados para recomendarte la manera más aconsejable de actuar.

 

Asesoría en pago de impuestos e iva

 

Situaciones de impago por falta de medios

Sumando todo lo anterior, existen partes de un contrato que no han generado ingresos suficientes como para hacer frente a la obligación. Este tema requiere un análisis de mayor profundidad. La ley concede la posibilidad de retrasar el pago sin que se genere un quebranto de su contenido, intereses aparte.

 

Mayor pago del impuesto sobre la renta de las personas físicas

A nadie le resulta agradable tener que pagar más a las arcas del Estado si realmente no es una obligación. En el caso de los expedientes de regulación temporal de empleo puede darse una controversia singular. Cada caso deberá ser estudiado por un asesor profesional para valorar cuáles son las posibilidades que existen. No obstante, al recibir una ayuda por parte de la Administración General del Estado estás viendo aumentada tu base imponible. Lo que se traduce en un mayor ingreso en concepto de rentas del trabajo. Por tanto, en el ejercicio siguiente deberás asumir a un pago mayor en la declaración del IRPF.

La ley contiene muchas obligaciones para el contribuyente, pero también muchos derechos. Para saber cómo debes defender estos últimos, lo ideal es que acudas a una asesoría legal y solicites el asesoramiento de sus profesionales para que te guíen todo el proceso.