Si tienes una pyme, seguro que habrás escuchado hablar de las deducciones del Impuesto de Sociedades. Sin embargo, muchos emprendedores desconocen cuáles son las más frecuentes, llegando a pagar más impuestos de lo que deberían. Por ello, en esta entrada, te explicamos cuáles son para que puedas optimizar los recursos en tu negocio.
Las deducciones para las pequeñas y medianas empresas en el Impuesto de Sociedades
Antes de desgranarte las deducciones más importantes, te recordamos que este impuesto grava las rentas que han obtenido las empresas en territorio español. A este impuesto se le pueden añadir deducciones, las cuales aminorarán la carga impositiva que sufren las empresas de todo tipo (en especial las pequeñas y medianas), y que pueden ser las siguientes:
1. Deducción por el impulso a determinadas actividades
Si la empresa decide apostar por un sector o actividad, como por ejemplo la Investigación y el Desarrollo, puede disfrutar de deducciones. Así, las deducciones más importantes por el estímulo de actividades son:
- Deducciones por la creación de empleo en diferentes colectivos. Por ejemplo, en el de las personas con discapacidad o jóvenes.
- Deducción de gastos por formación profesional.
- Deducciones por la conversación y mejora del medio ambiente.
- Deducción por la reinversión de los beneficios extraordinarios del negocio.
- Deducción en la inversión en producciones de cine, series, libros o espectáculos musicales. La desgravación puede llegar al 20% para producciones en España y que hayan superado un millón de euros de valor.
- Deducciones por las actividades investigadoras, en desarrollo o en la innovación en tecnología. En este caso, las deducciones pueden llegar hasta el 25 %.
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2. Deducciones por doble imposición
Este tipo hacen referencia a los impuestos pagados por lo mismo en el extranjero o tributado en dos sociedades. Existen de dos tipos:
- Interna. Hace referencia al reparto de los beneficios que pertenecen a dos o más sociedades que tienen domicilio fiscal en España. En este supuesto, la compañía podrá deducirse el 50 % de la cuota íntegra que corresponde a la base imponible de los beneficios, pero también la totalidad del impuesto en participaciones empresariales que cuenten con un porcentaje igual o superior al 5 %.
- Internacional. Se da cuando un sujeto pasivo grava la renta del impuesto en dos naciones o la misma se grava en dos sujetos pasivos y en dos países diferentes. Aquí, la deducción se puede dar, pero escogiendo el menor resultado del impuesto satisfecho fuera de nuestras fronteras, el que corresponda pagar en España o en caso de la entrega de beneficios gravados en el extranjero.
3. Bonificaciones
Muchas empresas pueden acogerse a bonificaciones. Algunas de las más comunes y que debes tener en cuenta, son:
- Las rentas que se obtengan en las dos ciudades autónomas de España, Ceuta y Melilla. La bonificación puede llegar al 50 % por los negocios realizados en estos dos puntos.
- El ahorro puede llegar al 50 % en la cuota al Impuesto si se declaran los beneficios de una cooperativa que está protegida especialmente. Estas pueden ser: las cooperativas de mar, las agrarias o las de trabajo asociado.
- Las bonificaciones llegan también a las rentas que procedan del alquilar de viviendas que cumplan con los requisitos actualmente recogidos en la norma. El ahorro puede suponer el 85 % del impuesto.
Para reducir la carga de impuestos de una pequeña y mediana empresa, la misma debe tener en cuenta las deducciones a las que tiene derecho en el Impuesto de Sociedades. La mayoría de organizaciones acuden a asesorías expertas para aplicar estas deducciones en su organización.